De Azaña a Bin Laden, pasando por Maura, Bakunin y Pasionaria

Descripción

Viajero incansable, lector irredento, constante en la inconstancia. La reflexión sobre el pasado y el presente, la preocupación por el devenir de la humanidad, por los resortes del pensamiento llevaron a Juan Avilés a dedicar su vida a comprender y enseñar las actuaciones de individuos y grupos para explicar el pasado y el mundo en que vivimos. Su amable sonrisa, su atención a la palabra del otro, su moderación y apacibilidad le han llevado a ser profesor de secundaria, dirigir un Instituto de investigación, varios grupos de trabajo internacionales, el departamento de Historia Contemporánea de la UNED, la puesta en marcha de un exitoso máster sobre La España contemporánea en el contexto internacional e innumerables tesis. Conciliar trabajo, familia y amigos, amigos traídos desde el colegio hasta la actualidad, amigos y discípulos reunidos a lo largo de la vida atesora Juan Avilés como el rico capital humano que posee, labrado durante más de medio siglo de profesión que hacen de él una persona muy apreciada, generosa, optimista, sensata, un historiador con una enorme curiosidad intelectual.