Campo intelectual y campo periodístico en la España contemporáneaun análisis empírico de sus relaciones en el espacio de la opinión de El País, (1986-1988)
- Zamorano Díaz, Yeray
- Emilio Lamo de Espinosa Michels de Champourcin Doktorvater/Doktormutter
Universität der Verteidigung: Universidad Complutense de Madrid
Fecha de defensa: 11 von Dezember von 2015
- Luis Enrique Alonso Benito Präsident/in
- Mario Domínguez Sánchez-Pinilla Sekretär/in
- Carlos Jesús Fernández Rodríguez Vocal
- Rafael Ibáñez Rojo Vocal
- Santos Juliá Díaz Vocal
Art: Dissertation
Zusammenfassung
El objeto principal de la tesis doctoral es el de las relaciones entre los «intelectuales» y los «medios de gran difusión» o, dicho con el vocabulario conceptual utilizado en la propia investigación, el de las relaciones entre el «campo intelectual» y el «campo periodístico» en la España del periodo democrático. Ahora bien, estas relaciones no son estudiadas de manera abstracta, sino que son abordadas desde una perspectiva, propia de las ciencias sociales, que pone en marcha procedimientos de confrontación con lo empírico y que atiende a la dimensión colectiva de prácticas situadas en contextos específicos. Así, la investigación se centra en un estudio de caso particular: el de la forma concreta en la que esas relaciones se desarrollaron en torno al diario El País en los años cumbre de su consolidación como instancia de «referencia dominante» (1986- 1988) en el espacio periodístico e intelectual español. Hemos propuesto una interpretación de los mecanismos sociales implicados en el funcionamiento cotidiano de estas relaciones. Para ello, se ha optado por estudiarlas tanto desde la teoría de los campos de Pierre Bourdieu y sus colaboradores y el concepto de Espacio de la opinión que han desarrollado Jacobs y Townsley como a partir de la implantación de una estrategia metodológica que combina el análisis de datos secundarios, una prosopografía de los autores de tribunas libres de la sección de Opinión en el periódico y la consulta de diferentes documentos de carácter autobiográfico de algunos de sus protagonistas. El espacio de la opinión de El País, como hemos constatado en el capítulo tercero de la tesis, debe ser contextualizado para una mejor comprensión de las relaciones entre campo intelectual y campo periodístico que son visibles en él. Este espacio tiene varias propiedades específicas que dependen de la posición que ocupan en el campo del poder los agentes que intervienen en dicho espacio. Las dos propiedades más relevantes que se extraen de nuestro análisis son la de su condición de espacio plural en el que se dan cita agentes que ocupan posiciones de estatus elevado en diferentes espacios sociales y la del predominio de agentes que provienen del campo intelectual. Ambas propiedades deben ser consideradas como una parte importante de la fórmula de éxito de El País en esos años y de la conformación de un «capital simbólico» ligado a su producto. Tras esta contextualización necesaria, hemos mostrado que la mejor manera de concebir la intensa relación entre este diario y los agentes del campo intelectual es la de conceptualizarla como parte de un «sistema de intercambio» entre ambos, el cual está determinado por una economía basada principalmente en bienes de carácter simbólico. Tal lógica de intercambio produce efectos en una doble dirección: en la incorporación de «valor intelectual» al periódico y a los periodistas implicados y la obtención de toda una serie de beneficios para los agentes del campo intelectual que participan en él y que se derivan de los notables efectos de difusión que produce la intervención en este espacio. Sin embargo, una comprensión más adecuada de este sistema de intercambio requiere un análisis de sus mecanismos específicos, de las condiciones sociales que se derivan de la organización periodística y de las lógicas generales y trayectorias históricas del campo intelectual español. El entorno inmediato de los periodistas de El País y la manera en la que se organiza el trabajo técnico de la opinión introducen varias determinaciones que hacen de él un espacio de intercambio desigual. Además, el papel de los periodistas «culturales» es fundamental en la gestión y mantenimiento de una «agenda» de colaboradores intelectuales potenciales. Por su parte, las competencias intelectuales no son valoradas por igual en este intercambio: el prestigio literario y el prestigio académico constituyen las principales formas de valor intelectual que permiten el acceso a este sistema de intercambio.