Eficacia de los sitios webs de los diputados chilenos como herramienta de la comunicación política
- PARADA GAVILAN, CAROLINA ANTONIETA
- Fermín Bouza Álvarez Director/a
Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid
Fecha de defensa: 14 de enero de 2016
- Félix Ortega Gutiérrez Presidente/a
- José A. Ruiz San Román Secretario/a
- Raquel Rodríguez Díaz Vocal
- Juan Jesús González Rodríguez Vocal
- María Luisa Humanes Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
La creciente línea de investigación dedicada al impacto de las nuevas tecnologías de la información en la Comunicación Política ha planteado la posibilidad que el uso y masificación de Internet, podría contribuir a aliviar el déficit estructural y funcional que sufre hoy el sistema político. Lo anterior debido a la naturaleza de los nuevos medios que han provocado un cambio paradigmático en la relación entre medios de comunicación, elites y ciudadanía. Corrientes optimistas consideran que las redes fortalecidas al amparo de la tecnología son capaces de fortalecer y otorgar mayor poder a la ciudadanía, lo que equivale a fortalecer la democracia. Otra corriente en cambio, ha mostrado una visión a lo menos escéptica respecto de las reales posibilidades de Internet para democratizar el ámbito político. Estas visiones han sido denominadas como ciberoptimistas y ciberpesimistas, respectivamente. El presente estudio realiza un recorrido bibliográfico por los principales exponentes de cada corriente, profundizando además en movimientos político-sociales que tienen como denominador común el uso de las nuevas tecnologías de la información como esencia de la lógica relacional. La reflexión se realiza desde la Teoría de Redes, evaluando el sitio web como un nodo de potenciales redes; y desde la Teoría de la Agenda Setting, explicando el uso de Internet como un mecanismo fuera del tradicional control de las élites. Se establece una cronología de los principales hitos mundiales considerados como referentes del impacto de Internet en la Comunicación Política. Desde las manifestaciones contra la Organización Mundial del Comercio en Seattle en 1999, hasta los Indignados de España del 2011, pasando por la campaña de Barack Obama y el movimiento generado a partir del 11M en Madrid, se repasan las características de estos hechos históricos, añadiendo dos casos de la realidad social y política chilena. El trabajo de campo se centró en la realidad chilena para estudiar la eficacia de los sitios webs de los diputados chilenos como herramienta de la comunicación política, mediante un estudio exploratorio-descriptivo. Para ello se consideró un muestreo censal de los sitios webs de los diputados del país, considerando los 66 sitios vigentes de los parlamentarios chilenos. Enmarcado en la línea investigativa de análisis de sitios webs del profesor José Luis Dader y su equipo, el presente estudio recoge las cuatro grandes dimensiones, que a su vez se inspiran en el modelo de De Landtsheer, adaptado a indicadores propios de la realidad chilena. Asimismo se añaden otras dimensiones, fruto de la reflexión propia por lo que a las dimensiones existentes (Información, Interactividad, Sencillez de uso y Atractivo Persuasivo) se agrega la dimensión ¿Redes¿, que viene a actualizar y enriquecer el instrumento. Respecto a los resultados cabe primeramente mencionar que sólo un 50% de ellos cuenta con sitio web, lo que en el contexto de la sociedad de la información y específicamente en la arena de la comunicación política, equivale a quedar marginado de la Tercera Edad, manteniéndose sin posibilidad alguna de establecer mecanismos más bidireccionales o multidireccionales que promuevan la información y la participación. De acuerdo a los puntajes obtenidos en las distintas dimensiones analizadas se desprende que el uso que dan a los sitios web los diputados es de orden informacional. Estos adscriben al modelo unidireccional de la comunicación de masas, en desmedro de las lógicas de relacionamiento de la sociedad de red. Aunque Chile ha liderado sistemáticamente los indicadores de uso de las tics en Latinoamérica, es posible afirmar que los diputados chilenos están subutilizando el potencial informativo, dialogante y participativo de esta herramienta, manteniéndose por debajo de los estándares de la ciudadanía y de otros estamentos de la sociedad.