La filosofía política en el estado modernoel problema del método

Laburpena

La emergencia del estado como forma específica de organización política motiva un cambio en la forma de teorizar sobre la política. Pero, también, la ruptura filosófica de la modernidad se hace sentir en el ámbito de la filosofía política. Comienza a abrirse paso la necesidad de nuevos métodos de un lado, el racionalismo se orienta a un naturalismo racionalista, con el que se pretende deducir todo el cuerpo doctrinal de la moral. El derecho y la política. De otro, la teoría empirista del conocimiento quiere imponer el atenimiento a los hechos: de ahí el renacimiento de la historia como ciencia positiva y su total imbricación con la filosofía política, o con la ciencia política, como hoy se denominaría a algunas de las aportaciones de la época. Pero esta misma corriente desvela la posibilidad de construcción arbitraria de modelos políticos desde los que analizar la realidad de la política. La síntesis de estos métodos no fue alcanzada en esta época (seguramente esta por conseguir). Pero Montesquieu edifica una bastante consistente ciencia política, anticipando claramente la sociología política y desenvolviendo, con clara conciencia de la novedad metodológica, una teoría de los gobiernos sobre la base de tipos ideales. Por su parte, Rousseau alumbra bien que elementalmente, el método dialéctico.