Valores curriculares en la universidadhacia una alternativa postmoderna

Résumé

En esta tesis se hace una apología de la universidad como ámbito comunitario privilegiado para tender puentes de inclusión ahí donde los planteamientos antropológicos y sociales de la Postmodernidad, alejados de la esencia y necesidades de la naturaleza humana, han creado abismos o rupturas. La universidad es una de las comunidades humanas que están más cercanas al Lebenswelt, o «mundo de la vida», ese ámbito entrañable de la vida corriente en el que se generan relaciones cercanas, afectivas y solidarias, y por lo mismo debe consolidarse como una auténtica promotora de un sentido de complementariedad que supere los rasgos decadentes de la Postmodernidad a saber: el egoísmo mayestático, la instauración del pensamiento débil, el relativismo moral y epistemológico, el individualismo, el mercantilismo, la cosificación de las personas y el hedonismo, favoreciendo, a la inversa, la apertura a los demás, la promoción del humanismo dirigido al bien común, fomentando el sentido de inserción de la persona en la naturaleza de conformidad con una ecología bien orientada, todo ello enmarcado por el derecho natural. Ése ámbito comunitario de la universidad debe ser propiciador de valores curriculares los cuales constituyen un ethos institucional que, a su vez, favorece la emergencia de un ethos personal en cada uno de sus integrantes y las acciones que como fruto se derivan de ambos, acaban siendo configuradoras de los mismos, ya que entre los tres elementos existe una necesaria integración. Bajo ese marco general se sostiene que el currículum como instrumento pedagógico al servicio del educando universitario debe tener una finalidad formativa integral a través de un proceso que parte de un cierto nivel de indigencia, pero que se orienta al logro de la mayor plenitud humana posible. Ese proceso educativo no debe quedar limitado a la transmisión de conocimientos y generación de habilidades requeridos por cada carrera profesional, sino a la incorporación de valores que, en una jerarquía objetiva, se conviertan en dinámica de acción, generando a través de su repetición virtuosa un conjunto de hábitos intelectuales y operativos que vengan a constituirse como una segunda naturaleza en el educando universitario, predisponiéndolo para la adopción de actitudes positivas en su desempeño profesional y en su vida personal.