Novela e ideologíael amor romántico como estrategia de poder en las novelas inglesas de la primera mitad del siglo XVIII

  1. Couce Rivas, Margarita
Zuzendaria:
  1. Isabel Medrano Vicario Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Defentsa urtea: 2001

Epaimahaia:
  1. Angeles de la Concha Muñoz Presidentea
  2. Ana I. Zamorano Idazkaria
  3. María Jesús Lorenzo Modia Kidea
  4. Margarita Almela Boix Kidea
  5. María Felisa López Liquete Kidea

Mota: Tesia

Teseo: 91545 DIALNET

Laburpena

Historia y literatura han mantenido siempre una clara relación, en función de la naturaleza peculiar de esta última como fenómeno cultural vinculado al bagaje ideológico de la sociedad que la genera. Este carácter histórico de la literatura la ha llevado a desarrollar una peculiar relación con la vida real de sus lectores, relación que en modo alguno ha sido unívoca. La literatura ha intentado reflejar la vida a través de sus páginas, pero al hacerlo ha transmitido el valor que dicha sociedad habia asignado a cada uno de los géneros y a su representación sexual. Cada cultura posee una definición propia de lo masculino y lo femenino, lo que ha hecho de la sexualidad una construcción cultura que, como la literatura, está dotada de autoridad propia. Esto ha determiando que desde su condición de fenómenos culturales, narrativa y sexualidad hayan estado íntimamente relacionados, especialmente con la aparición del amor como uno de los temas literarios fundamentales. Originando en la privacidad de las salas de lectura de los castillos feudales, el amor romántico defendía una representación sexual que, basada en el matrimonio, aportaba por primera vez a la literatura una visión, feminocénirca y uan relación particular entre los sexos. Tal representación fue adoptada posteriormente por autoras francesas que como Madmáme de Saudery influirían de forma determiante en las primeras novelistas inglesas del siglo XVII, en su adopción del amor como tema central y en la figura de la mujer como sujeto de deseo. Tal visión iría a compañada, en las novelas de mediados del siglo XVIII, de una exaltación de la unión conyugal y de la representación de la mujer pasiva en las novelas de personaje femenino, lo que daría lugar a la recreación de una heroína subordinada a una experiencia de marginación y opresión.