El Monasterio de Piedra y J. Federico Muntadas Jornethistoria del parque, vergel y jardín

Laburpena

El Monasterio de Piedra, localizado en el municipio zaragozano de Nuèvalos, fue fundado a fines del siglo XII por los monjes cistercienses, quienes comenzaron a modificar el terreno y el curso de las aguas del río Piedra para favorecerse de las mismas y de la belleza natural y espectacular de su peculiar paisaje. Durante los años 1839-1847 los edificios del monasterio y algunas de las tierras fueron comprados en pública subasta por el catalán Pablo Muntadas Campeny. Su hijo, Federico Muntadas Jornet-que nació en Barcelona en 1826 y murió en el Monasterio de Piedra en 1912 y que fue licenciado en Filosofía y en Jurisprudencia y Doctor en Letras así como escritor, político y piscicultor- transformó el lugar hasta convertirlo en un jardín paisajista, pintoresco y sublime, adaptado al terreno abrupto y majestuoso en donde el agua es su principal protagonista, poniendo en valor escenas naturales y puntos paisajistas e introduciendo elementos, materiales y conceptos propios de la jardinería del siglo XIX que seguían las tendencias de los jardines paisajistas ingleses, que es lo que principalmente, se sostiene y desvela en la presente tesis. Incluyó un establecimiento de aguas mineromedicinales, que explotó durante algunos años un manantial que descubrió y que fue finalmente clausurado, y un centro de psicifactoría que continúa en plena actividad. La conservación y restauración del monasterio le permitió dar alojamiento a los turistas que se acercaban hasta el, entonces, recóndito lugar, desarrollando con éxito el fomento del turismo privado. Constituido en tiempos modernos en Sociedad Anónima, comprende, además de lo dicho un hotel, varios restaurantes, cafetería y bares, áreas de recreo y actividades complementarias. Se encuentra declarado desde 1945 como Paraje Pintoresco y desde 1983 como monumento histórico-artístico de carácter nacional.