La expresión de lo trágico en el “ciclo mítico” de Valle-InclánLa presencia de Shakespeare y paralelismos con las tragedias de García Lorca
- Landín Martínez, Pablo
- María Clementa Millán Jiménez Directeur/trice
Université de défendre: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia
Fecha de defensa: 18 janvier 2016
- José Nicolás Romera Castillo President
- Ángel Luis Luján Atienza Secrétaire
- Francisco Javier Díez de Revenga Torres Rapporteur
Type: Thèses
Résumé
El ciclo mítico de Valle-Inclán está compuesto de cinco obras que tienen en común el espacio, las costumbres, las creencias y las transformaciones sociales que se dieron en la Galicia de finales del XIX y comienzos del XX. Se trata de las Comedias bárbaras, El embrujado y Divinas palabras. El presente trabajo pretende aportar algo más en la interpretación de estas obras a partir de su relación con las grandes tragedias de Shakespeare y las denominadas tragedias rurales de García Lorca. En el primer capítulo, "Vida y obra del autor" hay que destacar la relación de Valle-Inclán con García Lorca que, a pesar de hechos puntuales, se puede calificar de buena incluso de admiración del dramaturgo granadino respecto al gallego. Por otra parte, en una panorámica de los dos teatros se puede observar una evolución inversa: mientras en Valle-Inclán se pasa de la tragedia al expresionismo, en García Lorca sus últimas obras, Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba, son calificadas de tragedias. En el segundo capítulo titulado "La presencia de Shakespeare en los personajes del ciclo mítico", tras comentar varias declaraciones del autor respecto a la mirada "en pie" o shakesperiana (recogidas en el Anexo II), se continúa con un breve análisis de todos los personajes que conforman en ciclo mítico, resaltando aquellos aspectos de su caracterización que los acercan a la mirada más humana y shakesperiana de su autor. En los sucesivos apartados se profundiza en el análisis de una serie de personajes resaltando aquellos aspectos relacionados con el teatro de Shakespeare, algunos apenas observados por la crítica. En las Comedias se puede observar la tan comentada por la crítica relación con Rey Lear, pero también otras semejanzas como las que hay entre Hamlet y Cara de plata, o entre Edmond o Yago y don Farruquiño, sin olvidar a don Galán y Fuso Negro calificados de bufones shakesperianos. En cuanto El embrujado y Macbeth ambas obras tiene un tratamiento muy similar del mundo de las apariciones y sus consecuencias, pero también en la caracterización similar entre Anxelo y Macbeth, o Rosa Galans y Lady Macbeth. Por último en Divinas palabras, se puede apreciar ciertos aspectos comunes entre Falstaff y el Ciego de Gondar, u Otelo y Pedro Gailo, pero hay que destacar la caracterización de Mari-Gaila como personaje vitalista y de gran profundidad psicológica. En el capítulo III titulado "El teatro mítico de Valle-Inclán y las tragedias de García Lorca; dos mundo paralelos", se relacionan aspectos de ambos teatros, que han sido suficientemente estudiados por la crítica pero de forma separada. Así se puede observar paralelismos entre los elementos que conforman la sociedad rural, la moral cerrada o la mentalidad antiburguesa; las conexiones con la realidad en lo referido a la creación de personajes, topónimos o lenguaje; la recreación del mundo mágico, las premoniciones y elementos sobrenaturales, el mal de ojo y los conjuros; escenas concretas como las danzas de Divinas palabras y Yerma; el simbolismo espacial y animalístico; los principales conflictos entre los personajes y sus consecuencias; la función de los coros y la recreación de las costumbres populares. Termina este capítulo con un breve análisis de las principales escenificaciones de las estas obras en vida de sus autores, resaltando la relación entre ellas a partir de las críticas de la época (recogidas en el Anexo I) como puede ser la implicación de ambos autores en la dirección de algunas de sus representaciones, la valoración subjetiva e ideologizada de la prensa en sus críticas, o la buena recepción de la crítica y de los intelectuales en los estrenos pero no del público en general en posteriores representaciones.