La crisis de Esparta en el siglo IV a.C.La imposibilidad de un sistema económicamente inviable

  1. Pérez Martínez, José Alberto
Zuzendaria:
  1. Pilar Fernández Uriel Zuzendaria
  2. Adolfo J. Domínguez Monedero Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Fecha de defensa: 2016(e)ko otsaila-(a)k 05

Epaimahaia:
  1. José Pascual González Presidentea
  2. Jesús Daniel Cepeda Ruiz Idazkaria
  3. César Fornis Vaquero Kidea

Mota: Tesia

Laburpena

La derrota de Esparta en la batalla de Leuctra en 371 a.C. ha sido interpretada a lo largo de la historia como aquella que pone fin a su hegemonía o imperio sobre Grecia tras tres décadas e inaugura un período de crisis del que la ciudad no volverá a recuperarse jamás. Lo cierto es que dicha batalla puso al descubierto una serie de problemas sociales de orden interno que, según muchos historiadores, permanecían ocultos y, sin embargo, podrían haber tenido un papel fundamental en el desarrollo de dicho acontecimiento. Problemas como la desigualdad material entre los homoioi, la progresiva escasez de ciudadanos u oliganthropía, la corrupción, el clientelismo y, en definitiva, una situación de stasis generalizada, fueron propuestos como posibles causas del progresivo debilitamiento espartano, cuyo corolario sería la derrota en Leuctra. Si bien es cierto que estas causas, esgrimidas por algunos de los más prestigiosos historiadores de la antigüedad, como G.E.M de Ste. Croix, Moses Finley, Stephen Hodkinson, o Paul Cartledge, no son en absoluto descartables, cabe la posibilidad de que las mismas no hayan sido tanto causas de esa crisis del siglo IV, como consecuencias de una causa aún más profunda o lejana. Ello obligaría a pensar que quizá estos análisis de los hechos por parte de estos y otros historiadores, no habrían alcanzado la profundidad esperada, habiendo orientando su atención más hacia la "sintomatología" de la enfermedad que hacia su causa. Podría decirse que la presente tesis doctoral se propone por un lado un objetivo menor, que es mostrar cómo la errónea interpretación primitivista/sustantivista de la economía antigua ha conducido a buena parte de los historiadores a formular interpretaciones erróneas y confundir causas con consecuencias acerca de la crisis del siglo IV en Esparta y, por otro lado, un objetivo central o mayor, que es exponer una nueva hipótesis sobre la causa o causas originales de la crisis espartana del siglo IV, otorgando una mayor relevancia en el análisis a la ciencia económica sin olvidar, por supuesto, el aspecto social.