Competencias clave de las direcciones escolares para un liderazgo eficaz

Resumen

La intencionalidad de este trabajo está dirigida a identificar cuáles son las competencias más importantes y necesarias para ejercer profesionalmente la dirección de un centro educativo y, por tanto, poner de relieve la gran importancia que tiene la selección por perfil de competencias de quienes los han de liderar. El objetivo principal consiste por tanto, en determinar qué competencias clave ha de tener el líder de un centro educativo para ejercer la dirección eficazmente. Los objetivos específicos son identificar el estilo de liderazgo que deberían tener las direcciones y contrastarlo con el que realmente ponen en práctica, averiguar qué funciones consideran más relevantes en el ejercicio del cargo directivo, descubrir qué problemáticas afectan a la población de directores/as investigada y qué competencias a partir de las propuestas en un modelo fundamentado en la teoría son las que consideran clave para llevar a cabo un liderazgo eficaz. Todo ello desde un estudio diferencial que nos permita diagnosticar diferencias, si las hubiera, entre los siguientes estratos: a) los directores y directoras, b) los directores noveles y experimentados y c) centros de primaria y secundaria d) centros públicos y privados. En el marco teórico, llevamos a cabo un breve repaso de los modelos de dirección en España, desde el modelo corporativista de la Ley general de educación de 1970 pasando por el modelo participativo de la LODE y acabando con el modelo actual buroprofesional de la LOMCE. Intentamos delimitar el concepto de liderazgo educativo y describir los estilos de liderazgo instructivo y transformacional para enfocar el tema en los conceptos de liderazgo pedagógico y distribuido como clave del éxito en los centros educativos. Analizamos las funciones directivas, tanto desde la normativa vigente como desde el punto de vista de las propias direcciones, que deben desempeñar los directores de los centros educativos en el ámbito internacional y en el nacional, concretando para el caso de Cataluña donde llevamos a cabo nuestro trabajo de campo. Estudiamos cuáles son según otros investigadores las competencias asociadas al liderazgo escolar y los modelos de competencias para la dirección de centros educativos. Exponemos a partir de la revisión de otras investigaciones, cuál ha sido la problemática a la que se han tenido que enfrentar los directores y directoras de los centros en el desempeño de sus funciones. La metodología utilizada para desarrollar el proceso de investigación es descriptiva, ex-post-facto y transversal. Los instrumentos para la obtención de la información relacionada con los sujetos del estudio son unas entrevistas, un cuestionario y un grupo de discusión. Los resultados obtenidos en la fase empírica de la investigación, se presentan organizados para cada uno de estos instrumentos y para cada uno de los objetivos. En relación al estilo de liderazgo se concluye que el que debe seguir el director/a de un centro educativo es el distribuido y facilitador como base para practicar un liderazgo pedagógico. Pero en la práctica, el estilo de liderazgo que siguen es el de gestión y negociador o carismático, a causa de la gran cantidad de trabajo, falta de tiempo y limitaciones organizativas. En relación a las funciones, existe una total coincidencia a la hora de considerar que la principal función que debe acometer un director/a es trabajar en la mejora de los resultados educativos de los alumnos seguida de conseguir compromiso e implicación al considerar que actuar conjuntamente puede ayudar a organizar y planificar el centro. No encuentran relevantes las funciones de dirección pedagógica y de innovación. En relación a los problemas que más les afectan, la principal dificultad que deben afrontar en el ejercicio del cargo es la excesiva carga de trabajo, la gestión de personal; debiendo de ejercer de jefe de personal sin tener apenas capacidad decisoria, la relación con las familias; en cuanto a la resolución de conflictos y a su falta de implicación y la deficiente formación técnica para afrontar su cargo con garantías de éxito. , En relación a las competencias, encuentran muy importantes las capacidades sociales de empatía y comprensión interpersonal, es decir, de saber escuchar, comprender, e interesarse por las preocupaciones de los otros y también las competencias de gestión de las relaciones con los otros, concretamente priorizan el desarrollo de interrelaciones sabiendo mantener relaciones cordiales, recíprocas y cálidas y saber crear y mantener redes de contacto con diferentes personas para lograr las metas de trabajo, y la comunicación interna y externa.