El mito de la madre en la obra de Hervé Bazin
- Cacho Rodríguez, Santiago
- Brigitte Leguen Peres Doktormutter
Universität der Verteidigung: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia
Fecha de defensa: 06 von März von 2015
- Mercè Boixareu Vilaplana Präsidentin
- María Luisa Guerrero Alonso Präsident/in
- Lourdes Carriedo López Vocal
Art: Dissertation
Zusammenfassung
La tesis titulada El mito de la madre en la obra de Hervé Bazin abarca el estudio no solo de la obra narrativa de Bazin, sino también de sus ensayos y aspectos de su obra poética. Hervé Bazin vivió con sus dos hermanos una niñez apacible hasta que murió su abuela y se hicieron cargo de ellos sus padres. Su padre, hombre débil y abúlico, permitió que su esposa, una mujer fría y severa, maltratase a sus hijos y les hiciese la vida imposible. De esta bivalente experiencia vital, es la traumática la que guía lo convierte inicialmente en una autor iconoclasta que pretende vengarse de su madre y de la sociedad que asistió impávida a su calvario. Pero la obra de Bazin no llega a ser el tratado de agresividad que podría haber sido, porque, además, la literatura se convierte para él en un medio eficaz de catarsis liberadora. A través del personaje de la madre, actante omnipresente, tanto por su presencia como por su ausencia, la tesis trata de determinar el impacto de la antitética vivencia del autor en su obra. Pretende, así mismo, esclarecer cual de las experiencias vitales, que propician las buenas madres y que ocasionan las malas, son más reiterativas y cuál prevalece en definitiva. El estudio de la felicidad inducida corresponde con la fase pasiva y receptiva, durante la que la maduración psicológica y afectiva depende enteramente del cuidado que se recibe de la madre amante. Pero este tipo de madres escasea. Son más numerosas las madres egoístas e insensibles. Se explica porque la triple condición de mujer-esposa-madre entorpece su rol primordial. El comportamiento atípico de una madre o su ausencia originan trastornos irreversibles. Los afectados desdeñan los vínculos familiares o se convierten en marginados. Estas secuelas pueden no ser irreversibles, si los afectados cuentan con la ayuda de agentes vicarios. El más relevante es la abuela. Le sigue en importancia el padre y, por último, los allegados. En este empeño, median las instituciones benéficas y los elementos telúricos. Cuando la asistencia de la familia y el entorno cesa o se considera insuficiente, los personajes se afanan en buscar la felicidad deseada por sus propios medios. El ejercicio de una profesión gratificante les procura bienestar, prestigio social y amistades. Pero son, sobre todo, las relaciones amorosas las que propician nuevos espacios afectivos. El hallazgo del alma gemela conduce al matrimonio, en el que las relaciones no siempre transitan por un camino de rosas. Sin embargo los fracasos no los arredran y muchos personajes, si pueden, vuelven a intentar la experiencia, porque consideran que la fragilidad de la institución no anula su validez para crear una familia. Es ésta una de las mayores aspiraciones, porque la "famille-créée" conlleva el placer de perpetuarse y les resarce de los sinsabores que les pudo causar la "famille-reçue". Parece evidente que toda la "fauna materna proteica" que puebla la obra es tan solo el eslabón imprescindible en la cadena del desarrollo vial y el tramo necesario en el camino de la felicidad. Porque tanto, las carencias que provocaron las malas madres, como las ilusiones que propician las buenas, contribuyen, unas por defecto y otras por exceso, a evidenciar la existencia de un paraíso perdido y a incentivar el deseo de alcanzarlo. Así pues, a pesar de las dificultades y de los desencantos, y descartando los casos en los que el suicidio imposibilita cualquier otro final, el mensaje postrero de las obras es reconfortante: Aunque los momentos de felicidad logrados sean efímeros, el esperanzado afán de conseguirlos resulta siempre alentador