Tramitación administrativa de energía solar fotovoltaica en Españapropuesta de procedimiento simplificado

Resumen

En nuestros días, la gran mayoría de los países industrializados se desarrollan en base a dos líneas de actuación necesarias pero incompatibles: por un lado, la necesidad de generación y consumo de energía eléctrica, que da calidad de vida y que es una clave fundamental para ayudar a seguir progresando y generar riqueza y bienestar, y, por otro, y como contrapartida, los efectos negativos que provoca la generación de esta energía eléctrica necesaria, como por ejemplo, la combustión de carbón, gas natural, fuel-oil, etc., sobre la atmósfera y, en definitiva, sobre el medio ambiente. Afortunadamente, desde los países más desarrollados y con mayor presión mediática, se está comenzando a educar en valores medioambientales a nivel mundial para que cada vez más esta tendencia de generación de energía a partir de materia prima inagotable no contaminante (viento, agua, sol, etc.) se separe más de la generación contaminante y se acerque más a la generación a partir de energías renovables, colaborando en la medida de lo posible para proteger el medio ambiente y evitar el cambio climático. Para ello se lanzan e imponen continuamente planes y mensajes (por ejemplo, el conocido plan europeo de energías renovables �20-20-20�) para sensibilizar y hacer que generación y contaminación no vayan necesariamente de la mano, ya que la tecnología para la generación eléctrica mediante fuentes de energías renovables está implantándose y desarrollándose cada vez más eficientemente y en fase de continua mejora.