Emoción y Exclusión SocialUna relación al descubierto
- Bárez-Cambronero, Francisco Javier
- María Rosario Sánchez Morales Directora
Universidad de defensa: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia
Fecha de defensa: 15 de septiembre de 2020
- José Félix Tezanos Tortajada Presidente/a
- Javier Alfonso De Esteban Curiel Secretario/a
- Arta Antonovica Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
La presente Tesis Doctoral está basada en una investigación sociológica sobre el impacto e influencia de las emociones en contextos de vulnerabilidad y de exclusión e inclusión social. El propósito de la misma es poner al descubierto la dinámica interacción existente entre los problemas sociales relacionados con la vulnerabilidad y exclusión social y los estados emocionales que este tipo de situaciones producen en las personas que las sufren, para lo cual hemos tratado de analizar y comprender cómo se originan, cómo las afrontan y qué consecuencias tienen para sus vida, se trata de una relación absolutamente relevante a la hora de abordar cualquier tipo de acción encaminada a entender y actuar contra los procesos de exclusión social. Mi motivación personal para afrontar este estudio estriba en la reflexión y planteamiento en clave sociológica de muchas preguntas acerca del sufrimiento padecido por muchas personas que se encuentran en situación de exclusión social: ¿Tienen algo que ver las emociones en este tipo de problemas sociales? ¿Qué ocurre en el seno de algunos hogares para que haya personas que deciden abandonarlos o son expulsadas por sus familiares más cercanos? ¿Cómo es la experiencia emocional que se produce en estos caso? ¿Se puede hacer algo mediante la inteligencia emocional para hacer frente a estos problemas? Son algunas de las preguntas que fueron interpelando mi conciencia y especial sensibilidad sobre los conflictos familiares y su relación directa con determinadas experiencias de vida en la calle, con el convencimiento de que éste es un problema socioemocional. Lo novedoso de este trabajo se sitúa en dos planos de elementos complementarios: a) Sustentar el análisis en el binomio formado por la exclusión social y las emociones, desde la perspectiva de la Sociología de las emociones y b) Plantear la aplicación de acciones de educación socioemocional como medida de intervención contra la exclusión social. Consideramos que se trata de un enfoque fundamental para comprender que la mayor parte de las emociones y por tanto, las actitudes, comportamientos y conductas derivadas de ellas, están condicionadas por fuertes estímulos que producen las estructuras sociales, las normas y sistemas culturales a través de intensos y dinámicos procesos de socialización desde la infancia. Estamos ante una línea de trabajo orientado a analizar el potencial y posibilidades de utilización de la inteligencia socioemocional como herramienta de acción social contra la vulnerabilidad y exclusión social, acción que desde un nivel microsociológico puede convertirse en acción colectiva que estimule un comportamiento global. Los resultados y hallazgos obtenidos con esta investigación aportan evidencias empíricas que posibilitan afirmar que se pueden reducir los casos de exclusión social de manera significativa mediante la mejora y uso adecuado de la inteligencia socioemocional, puesto que consideramos que mediante el uso eficaz de las habilidades y competencias socioemocionales se puede modificar la manera en que se afrontan las situaciones de riesgo en el devenir de la vida cotidiana, evitando procesos de exclusión social. Es una perspectiva emocional y sociológica que proporciona “otros datos” y permite recabar evidencias empíricas que ayudan a observar y comprender mejor la estructura de la sociedad y las posiciones sociales desfavorables, en las que están muy presentes emociones como la ira, el miedo, la vergüenza, la culpa, la frustración, la ansiedad, la hostilidad, el desaliento, la impotencia, etc. Por otra parte, supone un firme planteamiento de propuestas de intervención, empíricamente avaladas, como acción creativa y transformadora que aborde esta problemática social. La vulnerabilidad y la exclusión social dan forma a un fenómeno que afecta a todos los ámbitos de la vida en sociedad; económico, político, social, educativo y cultural, así como a todas sus dimensiones; social, colectiva, familiar y personal y puede condicionar y comprometer la conducta y comportamiento, así como la libertad y capacidad de decisión individual y familiar y por tanto, el devenir vital de una gran parte de la población “como desviación de un ideal definido culturalmente como criterio de una forma sana o intacta de sociedad” . El número de personas y familias que pasa de una posición económica razonable a otra de precariedad extrema aumenta cada día. Se enfrentan a un problema para el que no están preparadas al no disponer de oportunidades, de capacidades y competencias para afrontar la situación, tal como detallan José Félix Tezanos, et al.: “La problemática de la pobreza, la desigualdad y la exclusión social se han convertido en una cuestión central en las sociedades de nuestro tiempo. Un verdadero drama que están viviendo numerosas familias que no estaban preparadas ni mentalizadas para esta eventualidad” . A la vista de lo expuesto, entendemos que en la atención social a sectores sociales, familias y personas que sufren estados de riesgo y exclusión social, se ha de realizar un trabajo orientado a tratar de recuperar las habilidades y competencias socioemocionales necesarias que les ayuden a lograr la plena autonomía personal e integración social, en definitiva, recuperar la libertad indispensable para organizar la vida personal y social. Se pone de manifiesto la imperiosa necesidad de cambio en las políticas públicas para que se orienten, no sólo a corregir y erradicar las causas estructurales generadoras de exclusión, sino también a recomponer los vínculos sociales y familiares deteriorados y restituir la plena participación a las personas afectadas. Si la exclusión social genera graves problemas psicosociales y emocionales, parece razonable pensar que se puede intervenir contra la vulnerabilidad y exclusión con acciones concretas como la que proponemos en el presente trabajo orientadas a mejorar y recuperar estados emocionales que actúen como factores protectores. De todas estas cuestiones surgen las preguntas de investigación: • ¿Qué papel juegan las emociones en los entramados de poder de la estructura social y de las claves culturales de muestra sociedad? • ¿Qué tipo de interacción existe entre las situaciones de vulnerabilidad y exclusión social y los estados emocionales de colectivos, familias y personas que padecen dichas situaciones? • ¿Cuáles son los acontecimientos vitales que actúan como factores causantes de procesos de exclusión social? • ¿Qué tipos de estados emocionales causan estos sucesos traumáticos de crisis y de dificultad? • ¿Mediante qué estrategias afrontan estos sucesos las personas y familias que los sufren? • ¿Cuáles son las consecuencias que tienen todos estos acontecimientos y experiencias emocionales para las vidas de estas personas? • ¿Qué percepción tienen estas personas sobre la importancia e influencia de los estados emocionales en sus experiencias vitales de exclusión extrema? • ¿Por qué ante semejantes trances de riesgo y vulnerabilidad, unas personas se ven sumidas en procesos de exclusión y otras no? • ¿¿Hasta qué punto las variables emocionales contribuyen a iniciar y/o mantener las situaciones de riesgo y exclusión social? • ¿Qué estados emocionales pueden favorecer los procesos de inclusión? • ¿Cómo podemos restituir el equilibrio emocional que ayude a lograr el bienestar y la autonomía personal y familiar? • ¿Cómo podemos utilizar la inteligencia emocional para luchar contra la exclusión social? Estas reflexiones y preguntas nos llevaron a establecer los objetivos y formular las hipótesis de nuestro estudio: Objetivos Objetivo 1: Profundizar y avanzar en el conocimiento del fenómeno de la Exclusión Social a través del análisis de sus claves emocionales. • Objetivo 1.1.- Identificar y analizar cuáles son los sucesos y circunstancias traumáticas y estresantes que perturban las vidas de estas personas como factores de riesgo y exclusión. • Objetivo 1.2.- Averiguar cuáles son los estados emocionales que provocan estos sucesos vitales en las personas que los padecen. • Objetivo 1.3.- Conocer y comprender qué tipo de estrategias se movilizan para afrontar estas situaciones. • Objetivo 1.4.- Conocer cuáles son las consecuencias que tiene para la vida de estas personas el impacto emocional que suponen sus experiencias traumáticas de exclusión social. • Objetivo 1.5.- Descubrir cómo influyen dichos estados emocionales en la explicación del inicio y/o mantenimiento de los procesos de vulnerabilidad y exclusión social. Objetivo 2: Indagar sobre el potencial de la Inteligencia Socioemocional como campo de conocimiento y desarrollo humano para contribuir a la búsqueda de acciones específicas de intervención orientadas a prevenir y erradicar la vulnerabilidad y exclusión social. • Objetivo 2.1: Analizar si las habilidades y competencias socioemocionales pueden actuar como factores protectores frente a las dificultades que llevan a las personas a posiciones de vulnerabilidad y exclusión social. La acción puesta en marcha para la consecución de estos objetivos consistió en llevar a cabo una experiencia de intervención mediante la aplicación de talleres de educación socioemocional específicos, orientados a mejorar y desarrollar las competencias socioemocionales para llegar a saber si se pueden prevenir y evitar determinadas situaciones de exclusión, así como facilitar y acortar los procesos de inclusión social. Hipótesis y variables. La inteligencia socioemocional, como capacidad para identificar, usar, comprender y gestionar las emociones propias y ajenas, utilizar habilidades sociales y mantener relaciones saludables, no sólo es un instrumento eficaz para orientar las vidas de las personas, sino que se nos presenta como un potente instrumento de investigación y de acción transformadora. Precisamente, esta investigación está fundamentada en esta capacidad y potencial para conocer y minimizar los riesgos sociales, de tal manera que orienta la formulación de hipótesis y variables de análisis con las que pretendemos probar que: • H.1: El desarrollo e incremento de las competencias socioemocionales dirigidas a fomentar factores protectores de carácter personal sirve para combatir la exclusión social. • H.2: El desarrollo e incremento de las competencias socioemocionales actúa como factor protector. • H.3: El desarrollo e incremento de las competencias socioemocionales ayuda a gestionar las situaciones de riesgo y los procesos de exclusión social. • H.3: El desarrollo e incremento de las competencias socioemocionales aporta efectos beneficiosos porque facilita el cambio de actitudes. • H.4: El desarrollo e incremento de las competencias socioemocionales posibilita conductas que favorecen la búsqueda de soluciones a las situaciones de exclusión social. • H.5: El desarrollo e incremento de las competencias socioemocionales aumenta las posibilidades de iniciar procesos de inclusión. • H.6: Implementar acciones de educación socioemocional dirigidas a fomentar factores protectores de carácter personal en contextos de vulnerabilidad contribuyen a prevenir determinados procesos de exclusión social. Es por ello que nuestro afán se centra en tratar de demostrar que las acciones (programas, talleres, etc.) de educación socioemocional constituyen un método útil y eficaz para luchar contra la exclusión social porque a mayor autoconocimiento y capacidad para activar competencias y habilidades socioemocionales; mayor autoeficacia personal percibida para afrontar situaciones de riesgo y resolver problemas y conflictos de manera eficaz y saludable y mayor probabilidad de evitar el inicio de procesos de exclusión social. Los resultados y hallazgos obtenidos aportan evidencias que posibilitan afirmar que el uso adecuado de la inteligencia socioemocional, junto a otras variables sociológicas, constituye una herramienta útil y eficaz para prevenir y luchar contra la vulnerabilidad y exclusión social. Metodología. Para el desarrollo de esta investigación hemos utilizado una metodología basada en la aplicación de dos técnicas de investigación cualitativa como son las entrevistas semiestructuradas y grupos de discusión con la finalidad de obtener datos y evidencias suficientes y claras sobre las cuestiones nucleares de esta Tesis Doctoral: ¿Cuáles son los tipos de contingencias y vivencias que pueden posicionar a las personas en situación de riesgo o exclusión social?, ¿cuáles son los estados emocionales que éstas causan en las personas?, ¿qué impacto y consecuencias tienen para sus vidas y cómo son las estrategias de afrontamiento que los sujetos movilizan ante estas crisis y dificultades vitales? Talleres de educación socioemocional. La propuesta que se presenta con esta investigación consiste en medidas y acciones de educación socioemocional proporcionadas por equipos especializados para fomentar las competencias personales orientadas a lograr una mejor adaptación personal ante las diferentes problemáticas experimentadas y facilitar los itinerarios de inclusión social. Es en esta línea de trabajo en la que se llevaron a cabo una serie de talleres de investigación con el fin de implementar un proceso de educación socioemocional orientado al entrenamiento y desarrollo de las habilidades y competencias socioemocionales como propuesta de intervención en contextos de vulnerabilidad y exclusión social y con el objetivo de verificar las hipótesis de investigación. Los resultados de la aplicación de los talleres aludidos se obtuvieron mayoritariamente mediante instrumentos de evaluación específicos como los cuestionarios TMMS-24, que se realizaron con el método de evaluación antes-post. A este respecto, los resultados nos hablarían de la magnitud de las diferencias (antes-post) de los rasgos evaluados y de la medida del efecto del taller en cada sujeto participante, lo cual aportaría evidencias y significación estadística puesto que estas diferencias positivas en el nivel de competencias socioemocionales constituyen las variables dependientes emocionales. Marco Teórico. Puesto que nuestra línea teórica, argumental y analítica pone el foco en el binomio relacional entre la vulnerabilidad y exclusión social y los estados emocionales que este tipo de problemáticas producen en las personas que las sufren, resulta fundamental comprender cómo se originan, cómo las afrontan y qué consecuencias tienen para sus vidas. Éstas son las razones por las que nuestra propuesta se basa en una perspectiva teórica que vincula e integra la sociología de las emociones y la sociología de la vulnerabilidad y exclusión social. Vistas las cuestiones anteriores resulta relevante detenernos en la idea de observar nuestra sociedad como un sistema social que genera desigualdades de acceso a diversos recursos materiales, económicos, financieros y educativos, desigualdad en el acceso a posiciones sociales desde la que acceder a mayores y mejores oportunidades y desigualdad en la estabilidad emocional, en definitiva, desigualdades y exclusión de la felicidad a una buena parte de la población. El interés en remarcar estos aspectos radica en la tesis que alumbra esta investigación; las estructuras y normas sociales y culturales afectan e influyen en el comportamiento de los individuos porque la mayor parte de las emociones, estados emocionales y sentimientos, se construyen en las relaciones sociales. A su vez, de manera recíproca, los individuos afectan y moldean el mundo y las formas que adopta la propia estructura social. “Este es precisamente el fundamento de la sociología, que como rama del conocimiento científico se interesa por las relaciones que se producen entre los seres humanos en un entorno dado” . Es por ello, que centramos el marco teórico en el que se sustenta esta investigación en las teorías sobre los problemas sociales relacionados con la vulnerabilidad y la exclusión social, así como las corrientes teóricas aportadas desde la sociología de las emociones. Igualmente se incorporan las aportaciones de los modelos teóricos sobre la inteligencia socioemocional y las emociones, y aquellas que atienden a los métodos de educación socioemocional. Resultados de entrevistas y grupos de discusión. Para tratar de identificar y comprender qué tipo de estados emocionales causan la vulnerabilidad y la exclusión social en las personas que las sufren, resulta fundamental conocer previamente cuáles son los procesos e itinerarios de acontecimientos y circunstancias traumáticas y estresantes a las que deben hacer frente estas personas que ven alterada de forma radical sus vidas cotidianas y las arrastran desde posiciones sociales de plena integración a otras de vulnerabilidad y en numerosos casos, a la exclusión residencial extrema. Ante estas cuestiones cabe preguntarse por qué unas se ven abocadas a la exclusión y consiguiente episodio de vida en la calle y otras no. Los resultados cualitativos obtenidos aportan respuestas y argumentos reveladores de análisis sociológico del binomio formado entre la vulnerabilidad y exclusión social por una parte y las experiencias emocionales individuales por otra. Es decir, nos hablan de la conexión e influencia entre los problemas que genera la estructura social y los daños y padecimientos que éstos causan en determinadas personas. Los testimonios obtenidos en las entrevistas y grupos de discusión revelaron una serie de contingencias vitales que en un determinado momento de las vidas de estas personas se convirtieron en factores generadores de exclusión, por tanto, en categorías teóricas y de análisis sociológico. Resultados de aplicación de Talleres de Inteligencia Socioemocional. Los resultados cuantitativos obtenidos mediante la aplicación y evaluación de los talleres de educación socioemocional se presentan como propuesta de intervención para la prevención de determinados procesos de exclusión social, así como una tentativa de establecer y aportar una medida concreta dirigida a minimizar los efectos del impacto emocional en situaciones de exclusión residencial extrema y facilitar los procesos de inclusión. Entre las personas que participaron en los 13 talleres realizados, 55 de ellas (67,07%) mostraron evidencias de mejoras en sus competencias socioemocionales, 27 de las cuales (49,09%), reportaron mejoras significativas. Los resultados y hallazgos obtenidos con el desarrollo de esta investigación nos llevan a plantear unas conclusiones de las cuales se expone aquí una síntesis: • Podemos reducir los casos de exclusión social de manera significativa con el desarrollo y uso adecuado de la inteligencia socioemocional mediante el incremento del nivel de las competencias socioemocionales y habilidades asociadas. • Los sucesos y contingencias vitales que afectan y alteran las estructuras afectivas y emocionales de los sujetos se convierten en categorías sociológicas de análisis porque actúan como factores de vulnerabilidad y de exclusión social. • Entre las situaciones y sucesos estresantes analizados adquieren un peso significativo los abandonos y expulsiones del hogar como estrategia de afrontamiento dando así lugar al inicio de procesos de vida en la calle. De forma que una inadecuada gestión emocional ante estos sucesos puede resultar un factor o causa precipitante de determinados procesos de exclusión social. • Llegar a vivir en la calle puede provocar un agravamiento de la situación personal al entrar en contacto con ambientes de delincuencia o de consumo de drogas y de alcohol. A la luz del peso de las evidencias empíricas aportadas con esta investigación, estamos en disposición de confirmar nuestras Hipótesis y concluir que implementar acciones de educación socioemocional dirigidas a fomentar factores protectores de carácter personal en contextos de vulnerabilidad contribuyen a prevenir determinados procesos de exclusión social. Entendemos que la aplicación de talleres y programas de educación socioemocional, junto a otros elementos, constituye una acción útil y eficaz para luchar contra la exclusión social, ayudan a reducir determinados casos de exclusión social extrema y facilitar los procesos de inclusión social porque el desarrollo de las habilidades y competencias emocionales pueden actuar como factores protectores frente a las dificultades que llevan a colectivos y personas a posiciones de vulnerabilidad y exclusión social.