Occidentalización, fin de la guerra fría y relaciones internacionales

Resumen

En sus inicios, mi trabajo se planteaba investigar lo que aquí se denominan conflictos regionales, por oposición al gran conflicto bipolar, por un lado, y a los conflictos locales, guerras civiles, por otro. En el proceso de estudio sobre los conflictos en el tercer mundo, poco a poco se iba desvelando que, en su origen, los conflictos debían mucho a la inclusión, en condiciones precarias, de los nuevos países recién independizados en un sistema de estados y en una economía mundial que les exigían rápidos procesos de construcción nacional y desarrollo económico, muy difíciles de llevar adelante. En los conflictos regionales que asolaron el tercer mundo durante la guerra fría se podían ver los efectos tanto de la implantación de formas de organizar la comunidad política y la vida económica y social importadas de occidente, el estado nación y la economía moderna, como de la influencia de la pugna bipolar. La invasión ira qui de kuwait, la respuesta occidental y la guerra y posguerra subsiguientes podían ser interpretadas como el ultimo de los conflictos regionales de la era de los bloques o el primero de una nueva era cuyas características estaban aun por dilucidar. La actuación de los estados de la coalición antiiraqui en el kurdistan, la postura de los países occidentales en la crisis yugoslava, la contradictoria política occidental hacia china, la prudencia y el silencio frente al golpe militar que impidió la victoria electoral del fis en Argelia planteaban nuevos interrogantes sobre los protagonistas, carácter y principios de la política mundial. El clamor recurrente a favor de las intervenciones de humanidad, la ingerencia directa de los países prestatarios o donantes en la eficiencia de los estados receptores, las criticas a los estados violadores de los derechos humanos, etc. No solo eran elementos difíciles de explicar dentro del paradigma realista, sino que negaban el viejo principio de que los estados actuaban busc