El concepto de soberanía y sus transformaciones, con especial referencia al caso mexicano

  1. Flores Gaxiola, Alba Beatriz
Dirigida por:
  1. Pilar Conde Colmenero Director/a
  2. María Méndez Rocasolano Director/a

Universidad de defensa: Universidad Católica San Antonio de Murcia

Fecha de defensa: 21 de febrero de 2014

Tribunal:
  1. Raúl Leopoldo Canosa Usera Presidente/a
  2. Diego Pascual Manzanares Jiménez Secretario/a
  3. Antonia Navas Castillo Vocal
  4. Florentina Navas Castillo Vocal
  5. Modesto García Jiménez Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

En esta tesis me aboco al concepto de soberanía con un objeto específico: analizarlo en el contexto de la nueva realidad internacional hacia la que algunos países transitan, y en cuya reflexión me propongo señalar elementos para la discusión del concepto desde la perspectiva de las relaciones internacionales hoy en día. El hacerlo de este modo ayudará a analizar el concepto de soberanía desde un punto de vista poco explorado en la reflexión doctrinal mexicana. La ratificación de México de varios tratados de libre comercio ha provocado la necesidad de meditar hasta qué punto los compromisos adquiridos por México van más allá de los límites que había aceptado en los convenios o tratados tradicionales y, en este sentido, qué efectos tienen con relación a la soberanía nacional. Se trata, pues, de elementos varios para el análisis de una tendencia, poco perceptible, hacia una mutua cesión de funciones estatales entre los Estados parte en los tratados de libre comercio. Asimismo, el abordar este tema llevará implícito otro gran objetivo: atalayar cómo las recientes tendencias del ámbito internacional hacia la globalización y la interdependencia parecen haber cuestionado la validez de la noción clásica de la soberanía nacional no sólo en México, sino en el mundo entero. Veremos como el concepto actual de soberanía aún está impregnado de las ideas que le dieron origen: el Papado y el imperio al exterior y la monarquía al interior; para ésta, la delimitación de su espacio de poder constituyó un imperativo histórico de supervivencia. Nicolás Maquiavelo y sobre todo Juan Bodino definieron el poder del Príncipe como el ejercicio que no reconoce poderes superiores, dicho sea. Luego, ya con el advenimiento de la Revolución Francesa, se dio paso a un nuevo concepto de soberanía: la del pueblo que la ejerce a través del Estado, de sus legítimos representantes. Donde dos elementos integran el nuevo concepto de soberanía: autodelimitación jurídica del poder estatal frente a los derechos humanos, en lo interno, y, en lo externo, el Estado como unidad diferenciada y reafirmatoria del poder estatal. En México, país de interés en este estudio, el concepto de soberanía se formó con los elementos mencionados, sin embargo, es importante señalar que en el origen del concepto de soberanía influyeron dos factores relevantes; el que su sistema jurídico fuera construido a partir del derecho español de la Edad Media, un derecho de naturaleza territorialista, y que, durante los tres siglos de colonización, hubiese persistido el principio del exclusivismo colonial, que excluía de los territorios de la Nueva España a todas aquellas personas que no fueran súbditos de la Corona. El resultado fue un concepto de soberanía demasiado limitado, cerrado. Este concepto fue interpretado de acuerdo a las circunstancias de cada época: unas veces para la defensa de los intereses nacionales frente a la agresión extranjera, otras, las más, de acuerdo a la ideología o a los intereses del grupo gobernante. Asimismo, valga como somera mención, que las guerras europeas dejaron en claro que el Estado nacional era insuficiente para garantizar una paz duradera, por lo que habría de construirse una comunidad internacional con la que los Estados nacionales estuvieran comprometidos para garantizar ese fin; de ahí la creación de la Sociedad de Naciones primero, y después la de los organismos internacionales actuales (ONU, OIT, UIT, y conocido etcétera).