El bullerengueEstética y ontología
- Valbuena Martón, Diego Ángel
- Jordi Claramonte Arrufat Zuzendaria
Defentsa unibertsitatea: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia
Fecha de defensa: 2022(e)ko azaroa-(a)k 23
- Alejandro López Román Presidentea
- Sergio Martínez Luna Idazkaria
- Aurelio A. Horta Mesa Kidea
Mota: Tesia
Laburpena
El Bullerengue es uno de los llamados “bailes cantados”, manifestación cultural de carácter fundamentalmente afrodescendiente propia de la región Caribe colombiana que integra canto, danza e instrumentos de percusión, principalmente tambores. Como discurso multitextual, se da en el bullerengue una multiplicidad de acoplamientos entre los distintos niveles estructurales que posibilita la distribución de la dominante (elemento formal primario o fundamental, que articula los demás según una lógica estructural) y organiza la experiencia estética. Tomando como punto de partida la Teoría de Estratos de Nicolai Harmann, este trabajo plantea un acercamiento a esta experiencia estética a través de los planos ontológico (lo constituivo, “lo que hay”), epistemológico (las categorías, “lo que podemos conocer”) y axiológico (los valores, “lo que podemos hacer”). Así, el primer capítulo presenta la mencionada Teoría de Estratos, vinculándola con los distintos campos disciplinares que se dan encuentro en el bullerengue: musical, narrativo, lírico, dancístico y escénico-performativo. En el segundo capítulo se trata la relación de trabazón entre los elementos constitutivos de la realidad estética tanto del bullerengue como de los niveles textuales que en él suceden; esta relación de trama, de “tejido”, es lo que se conoce como sústasis. Tras los dos primeros capítulos ontológicos, los tres siguientes son de carácter epistemológico: en ellos se da cuenta de las categorías, de cómo podemos conocer la realidad a partir de los elementos que la constituyen. En ese sentido, el capítulo tercero trata las categorías estructurales, aquellas que muestran la realidad polarizada en relaciones de oposición, presentando al mismo tiempo un gradiente conceptual, más que una relación de mutua exclusión. El cuarto capítulo, dedicado a las categorías de estrato, muestra la dimensión operacional de la experiencia estética a través de los conceptos de mímesis, poiesis, ilusión y catarsis. El quinto, sobre categorías modales, propone una aproximación a los modos de organización de la experiencia estética, a través de la relación entre repertorios (modo de lo necesario-contingente), disposiciones (modo de lo posible-imposible) y paisaje (modo de lo efectivo-inefectivo) Finalmente se trata el plano axiológico: el sexto capítulo introduce esta dimensión mediante los valores “de estrato”, para lo cual será conveniente el modelo del Desarrollo a Escala Humana de Manfred Max-Neef. Los valores experienciales, tratados en el séptimo capítulo, dan cuenta de la sensación como consecuencia de la percepción en la experiencia estética. Y el capítulo final trata la organización y la interpretación de la experiencia estética en relación con los valores modales. Palabras clave: bullerengue; estética; estratos; categorías; valores