La maternidad en las sociedades abiertasestrategias patriarcales en torno a la reproducción y la sexualidad

  1. Cuervo Pollán, Ana
Dirigida por:
  1. Amelia Valcárcel Directora

Universidad de defensa: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Fecha de defensa: 27 de marzo de 2023

Tribunal:
  1. Concha Roldán Panadero Presidente/a
  2. Alicia Miyares Secretaria
  3. Ana de Miguel Álvarez Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Resumen Teseo. Tesis ¿La maternidad en las sociedades abiertas: estrategias patriarcales en torno a la reproducción y la sexualidad¿. Ana Cuervo Pollán Esta tesis doctoral se plantea un estudio de la maternidad en las sociedades abiertas y sobre las estrategias patriarcales en torno a la reproducción y la sexualidad. Por sociedades abiertas entendemos aquellas formalmente igualitarias, plurales y democráticas en las que, sin embargo, perviven sistemas de dominación, especialmente, el sistema patriarcal. La Tesis, no obstante, se propone un estudio exhaustivo sobre una práctica concreta: el alquiler de mujeres para gestar hijos para terceras personas, algo que, sin ser en sí mismo una técnica de reproducción asistida, ha sido posible gracias a ellas. De hecho, el análisis de esta práctica ocupa tres de los cinco capítulos que componen este trabajo. Sin embargo, y como se ha anunciado, dicho estudio vendrá precedido por un análisis de la maternidad en general y de la influencia del patriarcado sobre la misma y finalizará con un análisis sobre la prostitución y la pornografía, a las que se considera íntimamente relacionada con la explotación reproductiva en tanto que los tres fenómenos ¿alquiler de mujeres para gestar, prostitución y pornografía¿ responden a la existencia de un sistema patriarcal que cosifica, mercantiliza oprime y subordina a las mujeres por el hecho de serlo. Al respecto, no se evitará subrayar la alianza entre patriarcado y neoliberalismo. Se matizará que si bien la prostitución, la pornografía y la explotación reproductiva responden, principal y esencialmente, a la existencia del patriarcado en tanto que sistema de dominación masculina sobre las mujeres, parece innegable que los fenómenos descritos se encuentran apoyados y fortalecidos por el neoliberalismo. El primer capítulo aborda las concepciones patriarcales de la maternidad y su impugnación desde la teoría feminista. Se demuestra cómo en los periodos o etapas de avance feminista se relajan las imposiciones sobre la maternidad, mientras que en los periodos de reacción o involución patriarcal se refuerzan, de tal modo que observar en qué momento los mandatos sobre la maternidad se vuelven más férreos sirve para conocer cómo es entonces la lucha por la igualdad sexual: si logra avances o si está en una etapa de estancamiento o retroceso. En este sentido, se advierte que la primera ola feminista ocupa desde finales del siglo XVII a finales del siglo XVIII y que durante ella se logran derechos básicos para las mujeres como el acceso a la educación elemental, a la elección de matrimonio y a cierta administración de sus propios bienes. Se demuestra que justo a finales del siglo XVIII y durante la primera mitad del XIX se impone una maternidad intensiva, adquiriendo esta un papel e importancia hasta entonces desconocida, tal y como detalla Elizabeth Badinter. Algo similar ocurre a mediados del siglo XX tras la segunda ola feminista que se inaugura en 1848, con la declaración de Seneca Falls, que se centra en las reivindicaciones sufragistas y que finaliza un siglo después, cuando termina la II Guerra Mundial en 1945. Justo entonces tambien se produce una involución patriarcal y durante ella se reimpone el papel de madres y esposas abnegadas. Tanto así que, como demostró Friedan, durante los años 50 en EEUU desciende significativamente la edad en que se contrae matrimonio, aumenta la natalidad y el porcentaje de mujeres que abandonan estudios superiores y sus empleos. Algo similar ocurrirá después del comienzo de la tercera ola feminista, que surge a finales de los años sesenta y ocupa las décadas siguientes con el objetivo de asegurar, entre otros, los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. En los años 80, en pleno asentamiento del neoliberalismo, surgen gobiernos conservadores que desmantelan el Estado de Bienestar, dificultando el acceso de las mujeres al trabajo. Justo entonces la reacción patriarcal recorta los derechos conseguidos en las décadas anteriores y vuelve a recomendar a las madres que abandonen sus trabajos para dedicarse al cuidado y al hogar. Una segunda reacción patriarcal a la tercera ola feminista puede detectarse a raíz de la crisis de 2008, cuando muchas mujeres pierden sus trabajos y se les convence entonces, esta vez con un discurso falsamente transgresor, que abandonar trabajos precarios o cejar en su búsqueda es rebelarse contra la explotación del mercado para dedicarse a la tarea supuestamente anticapitalista de cuidar a sus hijos. En este capítulo también se analizará otras dominaciones patriarcales relativas a la reproducción tales como la dificultad en el acceso a métodos anticonceptivos o a la interrupción libre del embarazo, así como el surgimiento de nuevas técnicas de reproducción asistida que, lejos de lograr la emancipación reproductiva y sexual de las mujeres, como se demostrará, han ahondado en ellas. Por todo, este primer capítulo finalizará con una batería de propuestas para lograr una maternidad libre, todas ellas encaminadas a la universalización de las tareas de cuidado El segundo capítulo describe la práctica del alquiler de mujeres para gestar y su tratamiento legislativo. En primer lugar, la contextualiza, ofrece varias definiciones al respecto, explica los motivos por el que algunas personas recurren a ellas y se detalla con qué términos suele ser nombrada. Posteriormente se explica el procedimiento científico técnico que la posibilita, con especial mención al modo de obtención de los gametos, la fecundación in vitro, y la implantación del embrión en el útero de la gestante. A continuación, se define el papel de las partes implicadas en el proceso, especialmente de las agencias de alquiler de mujeres para gestar y sus ¿usuarios¿. Finaliza este capítulo con un análisis de los tratamientos legislativos que recibe este fenómeno en distintos países y tambien con un estudio de las posturas y propuestas legislativas realizadas por distintos partidos, asociaciones, organismos y personas expertas. El tercer capítulo expone algunas teorías filosóficas, económicas y políticas que se han estimado útiles para pensar sobre la práctica de explotación reproductiva que protagoniza la tesis. Se comienza por la teoría aristotélica, observando como la concepción monoseminal de la reproducción presentada por Aristóteles, que consideraba a las hembras como seres pasivos en la misma y meros receptáculos para la gestación coincide con la esencia de los ¿vientres de alquiler¿. Igualmente, se dirime nociones esenciales del liberalismo político y económico, con especial atención al libre mercado y a la ley de la oferta y la demanda y su influencia en la concepción mercantilista de esta práctica. Del mismo modo, se discutirá si el emotivismo y el utilitarismo son éticas sólidas para enfrentar esta práctica o si una ética basada en la razón como la propuesta por Kant es más estimable a tal efecto. Será imposible no ilustrar esta cuestión atendiendo al marxismo y al feminismo marxista y tampoco se prescindirá de la crítica a la razón instrumental y la tecnificación elaborada por la escuela de Frankfurt. Se explicará que, aunque no son del todo asumibles las críticas a la Ilustración de algunos de sus miembros, sí se comparten sus advertencias respecto al uso instrimental de la razón y sus reservas respecto a que los avances científico-técnico redunden en el progreso ético de la humanidad. A continuación, se abordará la etapa postmoderna, con especial atención al neoliberalismo y la teoría queer como resultados de la misma y la influencia de estas corrientes en la legitimación de la explotación reproductiva. Se finalizará este capítulo exponiendo la posición del movimiento feminista y se justificará por qué es unánimemente contraria a esta práctica. El cuarto capítulo muestra una lista exhaustiva de pares de argumentos enfrentados relativos a la práctica del alquiler de mujeres para gestar y tambien un conjunto de argumentos elaborados contra esta práctica ajenos a la teoría feminista y propios del pensamiento religioso y conservador. Se ha intentado que ambas listas sean lo más amplias y rigurosas posibles y con ese afán de exhaustividad se han expuesto todo tipo de argumentaciones, desde las más especializadas y académicas, hasta las más ¿populares¿, informales y recurrentes. Si bien no se han ordenado temáticamente, estas argumentaciones giran en torno a asuntos implicados en este fenómeno tales como: la libertad, el consentimiento, el interés superior del menor, la distinción entre deseo y derecho, la filiación, la genética, la idoneidad de los compradores para responsabilizarse del menor, la adopción como alternativa, la diversidad familiar, los derechos sexuales y reproductivos, su consideración como posible servicio o trabajo, etc. El quinto capítulo se ocupa de analizar críticamente los fenómenos de la prostitución y la pornografía. Advierte que la prostitución es una institución patriarcal que consiste en asegurar que cualquier hombre pueda obtener por poco precio la disponibilidad sexual de las mujeres, aunque esta no sea voluntaria y deseada sino producida por la situación de extrema vulnerabilidad y necesidad económica que padecen las mujeres en situación de prostitución. En todo caso, se expondrán los diferentes modelos ético-jurídicos que se han concebido respecto a esta práctica, explicando el modelo prohibicionista, el regulacionista, el alegalista y el abolicionista de la prostitución, apostando por este último como el único garante de los derechos y libertades de las mujeres y las niñas. Tambien se reflexionará sobre la mal denominada ¿asistencia sexual a personas con discapacidad¿ como un modo de prostitución encubierta. La segunda y última parte de este capítulo estará dedicada a la reflexión sobre la pornografía. En primer lugar, se ofrecerá una definición de lo que es pornografía y se contextualizará su aparición y los soportes en los que se ha producido y distribuido a lo largo de la historia. Posteriormente, se problematizará esa definición desde una postura crítica, lo que lleva a revisar las ¿guerras del sexo¿ clásicas y actuales, es decir, los debates que han existido en torno a la pornografía desde que en los años 70 proliferara su visionado y este, desde entonces, no haya hecho sino crecer y universalizarse en tanto que han aumentado loso dispositivos para su distribución y consumo, y también se han relajado los impedimentos para el acceso a la misma. Se atenderá a las posturas clásicas antipornografía que llevaron a cabo feministas como Dworkin, MacKinnon, Barry o Jeffreys, así como a las activistas que la han defendido como Rubin, Vance o Echols. En este sentido, será imprescindible revisar el debate actual puesto que se observan algunos caminos debido a la transformación misma de la pornografía, resultando ser cada vez más violenta y consumida, y, además, por población cada vez más joven. En este sentido, se atenderá a trabajos como los de Ballester y Alario que exponen cómo la pornografía es actualmente un ejercicio cada vez más brutal de violencia contra las mujeres, pues si bien es cierto que autoras como Dworkin ya lo señalaban, la humillación que muestra sobre las mujeres no ha hecho sino recrudecerse décadas después. Se finalizará el capítulo apostando por la abolición de la prostitución, por perseguir su demanda con firmeza y apostar por recursos y servicios públicos suficientes y especializados para ofrecer a las mujeres en situación de prostitución la oportunidad de vivir una nueva vida, libre de violencia y explotación sexual. para ello, se estima oportuno, en primer lugar, facilitarles una solución habitacional y un ingreso mínimo vital. También será necesario la regularización de su situación administrativa, si la precisa, así como atención médica y psicológica integral y permanente con el objetivo de reparar en lo posible los numerosos daños que produce sufrir una situación de prostitución. Respecto a la pornografía, se exige la prohibición de su filmación, distribución y consumo, persiguiendo tanto su oferta como su demanda, aunque siempre evitando que las mujeres también prostituidas en ella sufran represalia alguna. Igualmente, se estima esencial una educación sexual integral que prevenga su consumo y que eduque a los adolescentes para que puedan tener relaciones afectivo-sexuales libres, seguras, respetuosas e igualitarias.