Sentimiento de soledad, estrés percibido, patrón circadiano de cortisol y función cognitiva en el envejecimiento

  1. Utrera Martínez, Lucía
Dirigida por:
  1. César Venero Núñez Director
  2. Mª Carmen Diaz Mardomingo Codirector/a

Universidad de defensa: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Fecha de defensa: 16 de noviembre de 2023

Tribunal:
  1. Julia Mayas Arellano Presidenta
  2. María Márquez González Secretario/a
  3. Francisco Javier Carricondo Orejana Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 827245 DIALNET lock_openTESEO editor

Resumen

La soledad no deseada es un sentimiento subjetivo que ocurre cuando las relaciones interpersonales se perciben como inadecuadas. Se ha propuesto que la soledad se compone de una dimensión social y otra emocional, que algunos autores diferencian en familiar y romántica. Algunos estudios indican que la soledad a largo plazo es un marcador de angustia psicológica que altera las respuestas del cortisol y se relaciona con un deterioro cognitivo en el envejecimiento. Un primer objetivo de esta tesis ha sido evaluar el sentimiento de soledad social y emocional en una muestra de personas mayores de 60 años, junto con los niveles de estrés percibido, los niveles de cortisol y ver su relación con la función cognitiva. Así, en una muestra de mujeres y hombres mayores de 60 años hemos evaluado el sentimiento de soledad social y emocional, la función cognitiva y el estrés percibido tanto en la actualidad como en el pasado. Además, se han recogido muestras de saliva a lo largo del día para medir el cortisol libre y calcular los índices diurnos de cortisol. Los resultados de este estudio revelaron que tanto la soledad social como emocional (familiar y romántica) de los sujetos se relacionaron con mayores niveles de cortisol libre a lo largo del día en los hombres mayores, pero no en las mujeres. Asimismo, observamos que unos niveles más elevados de soledad familiar, romántica y social se asociaron con un peor funcionamiento de procesos ejecutivos implicados en la habilidad visomotora, tanto en hombres como en mujeres. Además, la soledad social, también se asoció a una peor función de la memoria verbal declarativa en las mujeres. Cabe señalar que los dos tipos de soledad emocional (familiar y romántica) se asociaron con una mayor percepción de estrés actual, pero no con el estrés pasado, en las personas mayores. Sin embargo, la soledad social no se relacionó con el estrés percibido actual, ni pasado. Tanto en mujeres como en hombres, los niveles de cortisol en la noche se asociaron con una peor planificación y destreza motora, aspectos relacionados con las funciones ejecutivas. En el caso de la respuesta de cortisol tras despertar, se observaron asociaciones positivas con la memoria verbal declarativa en el grupo de los hombres, mientras que en las mujeres se relacionó con una peor capacidad visoconstructiva. Curiosamente, la intensidad de estrés percibido actual se relacionó de manera positiva con el cortisol liberado a lo largo del día en los hombres, pero no en las mujeres. Además, se observaron diferencias de sexo en la relación entre el estrés percibido actual y la función cognitiva. Así, mayores niveles de estrés percibido en la actualidad se asociaron con una peor función visoconstructiva y visoespacial en las mujeres, pero no en los hombres. En conjunto, esta tesis proporciona una evidencia novedosa de que existe una diferencia de sexo en la relación entre el sentimiento de soledad, ya sea social o emocional, y la alteración de los índices diurnos de cortisol, que se produce en los hombres mayores en la muestra de estudio, pero no en las mujeres. Además, también se han constatado diferencias de sexo en la relación entre el sentimiento de soledad y la función cognitiva, poniendo en evidencia la importancia de detectar y desarrollar intervenciones psicológicas y sociales para mitigar la soledad no deseada en poblaciones vulnerables y mejorar así el bienestar emocional y cognitivo de las personas.