Megalitos en el suroeste de la Meseta NorteAnálisis espacial

  1. Cerrada Ayllón, Ana M.
Zuzendaria:
  1. Jesús Francisco Jordá Pardo Zuzendaria
  2. David Cocero Matesanz Zuzendaria
  3. Enrique Cerrillo Cuenca Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Fecha de defensa: 2024(e)ko urtarrila-(a)k 15

Epaimahaia:
  1. Ramón Fábregas Valcarce Presidentea
  2. Elisa Guerra Doce Idazkaria
  3. Mario Menéndez Fernández Kidea

Mota: Tesia

Laburpena

La zona donde se ha llevado a cabo el estudio espacial de los megalitos se localiza al suroeste de la meseta norte y ocupa una superficie aproximada de dos millones de hectáreas que engloba la totalidad de la provincia de Salamanca, gran parte de la de Ávila, la de Zamora al sur del Duero y el suroeste de la provincia de Valladolid. El ámbito cronológico se ha restringido al periodo de construcción, entre el IV y el III milenio cal BC, considerando como megalito aquellas estructuras tumulares con cámara en su interior, construida generalmente con grandes piedras y destinada a inhumaciones colectivas. La importancia del estudio del megalitismo se pone de manifiesto en la gran cantidad de estudios y trabajos que se han realizado sobre esta materia, pero no se han acometido en esta zona con un enfoque espacial en toda su extensión. Nosotros lo abordamos tratando de encontrar patrones que nos llevaran a comprender las preferencias de las sociedades que los construyeron para la ubicación de estas estructuras. El estudio espacial se ha llevado a cabo, como no podía ser de otra manera en los tiempos actuales, con ayuda de los Sistemas de Información Geográfica (SIG) y toda la tecnología informática ligada a ellos, que no sólo facilita enormemente la labor, sino que proporciona herramientas de análisis muy útiles. Para llevar a cabo este estudio hemos revisado la bibliografía más destacada sobre el tema, tanto a nivel general como en la zona de estudio en particular, además de estudiar las fichas del Inventario Arqueológico de Castilla y León, con las que se han identificado los megalitos documentados hasta la fecha en el área de estudio. Estos análisis nos han permitido diseñar nuestra propuesta de investigación y fijar los objetivos del estudio, así como seleccionar las variables a estudiar. Tras este examen bibliográfico hemos realizado una descripción del área de estudio con el fin de comprender más adecuadamente las relaciones entre las distintas variables a considerar en el trabajo. A continuación, tras constatar la necesidad de realizar un trabajo de campo exhaustivo, se visitaron todos los megalitos conocidos, dedicando a esta parte un extenso capítulo descriptivo, en el que se integran los estudios preliminares existentes y los realizados ex profeso en el presente trabajo para cada megalito. Posteriormente, se muestran los resultados obtenidos en cifras y se comentan las relaciones que se observan de cada variable con los megalitos y entre la combinación de variables, finalizando con las conclusiones derivadas de la investigación, así como los aspectos que nos han resultado más interesantes y en los que profundizaremos, en el futuro, siguiendo esta línea de trabajo. Las variables sobre las que hemos trabajado son: altitud, pendientes, litología, suelos, masas forestales, distancia a cursos de agua, paisaje, visibilidad, índice de posición topográfica, elementos arquitectónicos y ajuares, fundamentalmente. Una labor imprescindible que se ha realizado para situar los megalitos en el espacio ha sido su localización y correcta georreferenciación ya que, para el desarrollo de un estudio espacial fiable, las coordenadas tienen que ser exactas y así poder cuantificar los valores de las variables estudiadas y determinar sus características sin cometer errores espaciales de base. Con las coordenadas obtenidas se elaboró un fichero para poder ser utilizado en un SIG. La parte descriptiva de cada megalito se ha estructurado en varios apartados comunes para todos ellos, con los datos numéricos y cartográficos de la localización; un recorrido por la historiografía desde sus inicios; la descripción de lo encontrado en cada visita; una valoración sobre el estado de conservación actual y la cronología, y las referencias bibliográficas para cada uno de ellos. La cartografía elaborada es uno de los elementos más relevante del trabajo cuya pretensión ha sido acercarse al complejo mundo del megalitismo, poniendo de relieve lo que se conoce hasta ahora en la región de estudio, tratando algunos aspectos de los muchos que se pueden emprender en el futuro y que puede servir de base a futuras investigaciones. Con los datos obtenidos del análisis de las diferentes variables se ha podido determinar la influencia de los pisos de altitud y las pendientes, así como la litología, los tipos de suelo y los demás factores estudiados, incidiendo especialmente en su relación con el paisaje, concluyendo que la preferencia en la localización de los túmulos no se redujo a un criterio único o dominante, y para algunas de las características estudiadas lo que resulta más evidente es la identificación de tendencias para la ubicación de los túmulos en un determinado lugar.